1. Electrodomésticos Eficientes Uno de los mayores consumidores de energía en el hogar son los electrodomésticos. Invertir en electrodomésticos con una clasificación energética alta (A++ o superior) puede reducir significativamente tu consumo eléctrico. Aunque suelen ser más caros al principio, la inversión se recupera rápidamente a través del ahorro en la factura de la luz.
2. Iluminación LED Las bombillas LED consumen hasta un 80% menos que las bombillas tradicionales y tienen una vida útil mucho más larga. Cambiar todas las bombillas de tu casa por LED es una manera sencilla de reducir el consumo energético sin sacrificar la calidad de la iluminación.
3. Ajuste del Termostato Ajustar el termostato de tu sistema de calefacción o aire acondicionado puede generar grandes ahorros. Durante el invierno, mantenlo a una temperatura entre 19 y 21 grados, y en verano, no lo pongas por debajo de 24 grados. Además, asegúrate de apagar la climatización cuando no estés en casa para evitar consumos innecesarios.
4. Desenchufar Aparatos Muchos aparatos eléctricos continúan consumiendo energía incluso cuando están apagados, lo que se conoce como «consumo fantasma». Desenchufa los dispositivos que no estés utilizando, o utiliza regletas con interruptor para desconectar varios aparatos a la vez de manera más eficiente.

El ahorro energético es una combinación de pequeños cambios en los hábitos diarios y la inversión en tecnología eficiente. Implementar estos consejos no solo te permitirá reducir tus facturas de electricidad, sino que también estarás contribuyendo a un futuro más sostenible. Si quieres más asesoramiento sobre cómo reducir tu consumo energético, no dudes en contactarnos.